Racataplan es una marca de moda infantil, con origen gallego, que nace para ofrecer una opción sostenible y cómoda para los más pequeños. Fabrican prendas de ropa de forma artesanal, una a una, para aprovechar la tela lo máximo posible y la tela sobrante la envían a productores locales de Madrid, que reutilizan ese tejido. Este proyecto nace de la necesidad de la creadora por encontrar ropa ecológica y confortable, ya que no encontraba ninguna opción que se adaptase a estas necesidades. Después de ser despedida tras su baja maternal decide emprender Racataplan, con el nacimiento de su primer hijo.

Las telas se reciben de Alemania y son telas orgánicas con certificado GOTS (Global Organic Textile Standard). Todo el proceso de fabricación del producto se hace en Galicia, donde trabajan con proveedores locales de la zona. No utilizan tintas con tóxicos para sus productos y apuestan por tejidos ecológicos y elásticos, para aportar una mayor comodidad y suavidad en la piel de los niños. Las telas orgánicas tienen muchas ventajas sobre las telas convencionales, ya que no usan transgénicos ni pesticidas, no se necesita tanta agua para su fabricación, consiguen mantener la suavidad gracias a un cultivo y tratado natural, deja que la piel transpire y ventile mejor, es hipoalergénico, se tienen en cuenta las condiciones laborales de los productores, etc. Además, han creado un packaging sostenible basado en el Cradle to Cradle.

El objetivo de Racataplan es ofrecer una alternativa de moda infantil saludable y cómoda, que favorezca la movilidad y la creatividad de los niños, huyendo de la ropa rígida o áspera, que reduce el movimiento de los más pequeños. Esta iniciativa promueve que los niños sean creativos, disfruten de su infancia, que se preocupen de cuidar al planeta, y de aportarles comodidad y salud.