¿Quiénes son los actores de la cadena de valor del papel y cuál es su importancia para la economía del País?
Según el informe “Importancia Socioeconómica de la Cadena de Valor de la Celulosa, Papel y Cartón”, 2018[1], la cadena de valor del papel, constituida por más de 17.000 empresas, da empleo directo a alrededor de 182.000 personas y tiene una facturación directa de 23.094 millones de euros. Además, supone un 4,5% del PIB (por aportación directa, indirecta e inducida); 18,5% del empleo industrial y 1,8% de la recaudación fiscal total. Por todo ello, se le atribuye un efecto impulsor y de arrastre en el conjunto de la actividad económica española.

De ella, hacen parte una multitud de actividades económicas:

• plantaciones de madera para papel;
• industrias de la celulosa y del papel;
• industrias transformadoras;
• servicios de impresión, reproducción y acabados;
• empresas de publicidad y marketing directo;
• industria editorial;
• actividades postales y de correos, y
• el sector de recuperación de papel y cartón, cerrando el ciclo.

La industria papelera está representada en casi todas las CC. AA, en la mayoría de los casos ubicada en zonas rurales de la España vaciada, constituyendo por eso, una fuerza motriz para el desarrollo económico y social de estos entornos.

Para apoyar tan amplio y diversificado tejido empresarial, existen una docena de asociaciones en toda España, de las que mencionaré aquí, por su dimensión, dinamismo y actividades: ASPAPEL[2], AFCO (cartón ondulado), ASPACK (fabricantes de envases, embalajes y transformados de cartón) y REPACAR (Asociación Española de Recuperadores de Papel y Cartón).

¿Cuáles son las características de esta cadena de valor, que la posiciona en la 1ª línea de la Descarbonización y de la Economía Circular?

En primer lugar, tenemos la propia materia prima – fibra de celulosa – proveniente de madera, producida en bosques explotados de forma responsable y sostenible, muchas veces, certificados según las normas FSC y/o PEFC. Además, tratase de una materia prima local, renovable y neutra en carbono.

Por otra parte, hay que destacar las altas tasas de reciclaje del sector (alrededor de los 80%), lo que lo sitúa entre los primeros de Europa y la reciclabilidad de los productos de papel (un 100%).

También se destacan, las grandes inversiones llevadas a cabo en la última década, que han permitido desacoplar el crecimiento económico de esta industria, de las emisiones de CO₂ y reducir sustancialmente, todos sus impactos ambientales adversos.

Por último, la coyuntura actual, en lo que se refiere a las políticas europeas (plasmadas en el Pacto Verde Europeo) y, en particular, a la nueva Ley de los Plásticos, ha permitido destacar el producto papelero, como el mejor sustituto – sostenible, renovable, compostable y reciclable – de los plásticos de un solo uso.

Líneas de actuación propuestas para la recuperación, transformación y resiliencia de la cadena de valor del papel

Las líneas de actuación de la cadena de valor del papel, han sido definidas de forma global y consensuada, en el “Proyecto inversor Papel BCD (BiCircularidad Descarbonizada)”, candidato a los fondos del Plan Nacional de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Estas líneas, abarcan 4 áreas distintas:

1. Reducción de la Huella Ambiental, a través de la eficiencia energética, uso sostenible del agua y ecoinnovación en la sustitución de productos (diseño de alternativas de papel, para sustituir a productos basados en materiales de origen no renovable, como es el caso del plástico).
2. Economía Circular, donde se destacan proyectos de valorización de residuos de proceso (en la cadena de valor o fuera de esta y que van más allá de la recuperación de la fibra de celulosa); mejora de la calidad del reciclaje y su medición.
3. Descarbonización, muy enfocada en la sustitución de los combustibles fósiles, en las cogeneraciones y demanda de energía térmica, por otros de origen renovable, como es el caso de la biomasa y del hidrógeno verde, de modo a alcanzar un 100% de energía eléctrica y térmica de fuentes renovables.

4. Transformación Digital, que permitirá generar y gestionar datos e información de monitorización y medición de los procesos, para comprobar los cambios y cuantificar las mejoras alcanzadas, hacia la economía circular descarbonizada.

Proyecto inversor Papel BCD (BiCircularidad Descarbonizada)

Este proyecto, fue divulgado públicamente el 20M, en un evento virtual, que contó con la presencia de los principales actores de la cadena de valor del papel y, en su clausura, con la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto.

La cadena de valor del papel, ha reivindicado un PERTE[3] para el proyecto BCD Papel, que cuenta con un plan de inversión de 1.400 millones de euros (a lo largo de 3 años), reúne 49 empresas (de los sectores de: celulosa, papel y cartón, transformación, comunicación gráfica, distribución y recuperación) y 180 proyectos en 11 CC. AA (el 70% de los cuales se desarrollan en la España vacía[4]).

Dichos proyectos, están alineados con los 4 ejes de actuación de Papel BCD y son replicables en otras empresas, potenciando la transformación de toda la cadena de valor del papel. Además, tienen un impacto tractor en la economía y empleo, a nivel nacional:

• cada millón de euros de valor añadido, generados en la cadena de valor del papel, movilizará 2,2 millones de euros de valor añadido, a nivel nacional.
• En cuanto al empleo, Papel BCD, permitirá crear 4.200 empleos directos y 8.500 empleos indirectos.

El rol y contribución para el proyecto BiCircularidad Descarbonizada, de las asociaciones de papel y cartón de España

Durante el evento, han intervenido algunas de las asociaciones implicadas en el proyecto Papel BCD, particularizando las líneas principales de innovación y modernización, de que se destacan:

• José Ramón Benito – presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Envases, Embalajes y Transformados de Cartón (ASPACK), ha referido la innovación como la principal palanca del sector. Según él: “se están desarrollando materiales que sustituyen los laminados en polyester plata por filmes metalizados compostables; las bandejas de plástico por envases termoconformados y biodegradables, y también, desarrollando productos que sustituyen las anillas de plástico de los packs de las latas de bebidas y las mallas de los cítricos, por envases de cartón. Nos encontramos en un proceso continuo de modernización y digitalización, con nuevos desarrollos en máquinas de acabados y utilizando tintas compatibles con los alimentos; eliminando aceites y metales”.
• Angel Dapena – director de la plataforma la bolsa de papel , subrayó el crecimiento de la demanda de las bolsas de papel, con significativas ventajas frente a las de plástico, por tratarse de un material renovable, biodegradable, reciclable y reutilizable.

La industria ha apostado por la innovación, desarrollando procesos de I+D a lo largo de toda la cadena de valor, que permiten proporcionar a los clientes y consumidores, bolsas de papel adaptadas a la amplia tipología de comercios y modalidades de compra. Citando sus palabras: “Así, encontramos bolsas de papel capaces de llevar grandes pesos o productos húmedos; o bien, bolsas de papel altamente personalizadas que son el mejor exponente de una imagen de marca”.

Fig.1: bolsas de papel para todo y para todos

• Manuel Fernández, presidente de la Asociación Española de Recuperadores de Papel y Cartón (REPACAR), considera fundamental “el incremento de las tasas de recuperación, la modernización del sector; la mejora de los sistemas de recogida de residuos de papel y cartón, así como, la calidad del material recuperado”. Para lograr estos objetivos, la transformación digital que ya se ha iniciado, necesita de los fondos de apoyo para proseguir y consolidarse.

Proyectos de Descarbonización y Revolución Circular en la Cadena de Valor del Papel: el testimonio de sus protagonistas

Grupo LECTA

• Lema corporativo: “Juntos, comprometidos a desarrollar soluciones innovadoras basadas en biomateriales para un mundo más sostenible”.

·         Inversiones Ambientales: más de 146 millones de euros en los últimos 10 años.

Los proyectos de inversión de LECTA, incluidos en Papel BCD ponen el foco en la apuesta por el desarrollo de nuevas soluciones y aplicaciones innovadoras en ámbitos como el embalaje y también importantes inversiones en descarbonización.

Según su consejero delegado Eduardo Querol: “la innovación y I+D de productos de sustitución, representa un reto fundamental para LECTA y para toda la cadena de valor del papel”. Se están buscando alternativas para utilizar el papel en soluciones complejas donde el plástico era la 1ª opción, con los beneficios que le están asociados, como el reciclaje y compostaje, por tratarse de un material natural y sostenible.

Hay un amplio abanico de nuevos productos en desarrollo, cada uno de ellos con funcionalidades distintas, de que son ejemplos:

• vasos de cartón para bebidas, donde se sustituye la capa de polietileno, por una capa de estucado, que mantiene las mismas propiedades;
• bolsas de congelados hechas de papel; etc.

Por otra parte, la implantación de estos proyectos en zonas rurales de la España vacía, contribuye a la vertebración territorial.

Por último, los proyectos Papel BCD inciden también, en la descarbonización/reducción de la huella de carbono y aumento la eficiencia energética, bien como en la digitalización, que permitirá medir y comprobar el logro de los objetivos de reducción.

GRUPO SAICA

SAICA, se ha convertido, en los últimos años, en el 1er productor de papel de España, con más de 1/3 de la producción total.

El grupo Saica ha adoptado un modelo de integración vertical, donde la economía circular juega un papel central, involucrando las empresas de su propia cadena de valor del papel. De entre ellas, se destacan:

• Saica Paper, que recicla 3 millones de toneladas de papel y cartón/año.
• Saica Pack – convierte el papel reciclado, en soluciones innovadoras y eficientes de embalaje de cartón ondulado.
• Saica Natur, que bajo el objetivo “Vertido Zero”, presta servicios medioambientales para la gestión y transformación de residuos en materias primas secundarias, fomentando el uso de energías renovables e implementando nuevas soluciones tecnológicas.
• Planta de Valorización Energética, donde más de 480.000 toneladas de residuos al año son utilizadas como combustible, para la obtención de energía eléctrica y vapor, evitando su envío a vertedero y el consumo de combustibles fósiles.

Según su presidente Ramón Alejandro, la estrategia de sostenibilidad del Grupo Saica, está asentada en 3 retos fundamentales:

1. Descarbonización;
2. Reducción del consumo de agua y
3. Economía circular.

De cara a minimizar su impacto en el entorno, el grupo trabaja para alcanzar el objetivo “Cero residuos”. Para ello, desarrolla proyectos que van orientados a potenciar el uso, de los más variados tipos de residuos/subproductos de sus procesos productivos, para evitar su envío al vertedero, como en los casos siguientes:

• en su planta de valorización energética, convierte en energía – vapor y electricidad – alrededor de  500.000 toneladas de residuos no peligrosos del proceso de producción de papel. Además, está investigando para hallar una solución a las cenizas (60 mil toneladas) que restan del proceso de valorización energética;
• los lodos, procedentes del tratamiento de aguas de proceso, son destinados a aplicaciones agrícolas (210.000 toneladas);
• lidera el proyecto “ECOFIBRA” un modelo innovador e integral de economía circular, para diseñar y validar un material composite de matriz termoplástica aditivada y con propiedades mecánicas avanzadas, a partir de fibra de celulosa recuperada.

En lo que se refiere a la innovación en productos de sustitución, se presentan los siguientes ejemplos:

Fig.2: Saica Innovación y Economía Circular

ENCE Energía & Celulosa

ENCE es la primera empresa de Europa en producción de celulosa de eucalipto y segunda por cuota de mercado (la capacidad de producción de celulosa se eleva a 1.200.000 toneladas al año).

La compañía produce celulosa de eucalipto de alta calidad en sus biofábricas de Navia (Asturias) y Pontevedra, en las que aplica las tecnologías más respetuosas con el medio ambiente y procesos de mejora continua para reforzar su competitividad y su calidad.

ENCE trabaja para que sus instalaciones sean un referente en gestión ambiental. Los indicadores ambientales son, junto con los de seguridad, los primeros en analizarse diariamente.

Jordi Aguiló su director general, ha referido en la presentación del proyecto Papel BCD, la apuesta del grupo por una “Recuperación Verde”, basada en 2 pilares:

1. Bioeconomía circular[5];
2. Eficiencia energética.

“Apostamos por una descarbonización muy clara de la sociedad, y pensamos que nuestro sector puede tener una contribución muy importante”.

Los objetivos de ENCE, son ampliar su cartera de productos alternativos a productos con origen no renovable.

Los proyectos presentados en el ámbito de Papel BCD, hacen parte del Plan Estratégico 2019-2023, destacándose:

1. la diversificación en nuevos productos

• producción de celulosa (80 mil toneladas/año), para aplicaciones absorbentes – productos sanitarios higiénicos (pañales y compresas); o aún,
• fabricar productos que actualmente se están importando de otros continentes, como es el caso de la viscosa[6] usada para fabricar prendas de vestir, lo que permitirá reducir muchísimo la huella de carbono asociada al transporte.

1. En el pilar de la eficiencia energética, están apostando por proyectos energéticamente autosuficientes, aprovechando las ventajas competitivas de la energía producida con Biomasa. La biomasa[7] en cuanto fuente de energía, presenta ventajas como:

• ser totalmente gestionable, comparada con otras renovables como la solar o la eólica;
• es un recurso propio y abundante en España;
• soluciona el problema de la quema incontrolada de rastrojos y previene el riesgo de incendio;
• es la energía renovable que más contribuye al desarrollo rural;
• es neutra en emisiones de carbono y evita las emisiones difusas de los subproductos forestales y agrícolas.

ENCE, produce su propia energía eléctrica y vapor y, además, es excedentaria.  Así, uno de los proyectos incluidos en Papel BCD, es una planta de biomasa de 40 MW, que proporcionará también energía renovable al sistema eléctrico, reduciendo su huella de carbono.

Considerando las características mencionadas anteriormente, los proyectos de inversión Papel BCD, tienen un efecto tractor tanto al nivel nacional como al nivel local, contribuyendo para la vertebración territorial. En el caso concreto de ENCE, las inversiones irán realizarse en un pequeño pueblo – Navia, del mundo rural de Asturias (495 millones de euros, en 2 años), suponiendo una generación de empleo de 1.250 puestos de trabajo, entre directos, indirectos e inducidos.

Grupo Miquel & Costas

El Grupo Miquel & Costas, dedicase a la fabricación de papeles especiales de bajas gramajes, siendo su destino, mayoritariamente (alrededor de un 90%), la exportación.

Su vicepresidente y director general, Jordi Mercader, ha destacado en el ámbito del proyecto Papel BCD, las inversiones en tecnología para mejorar la eficiencia energética.

Según él: “No hay mejor contribución a la sostenibilidad del planeta que la reducción de los consumos de energía, Independientemente de cuál sea su fuente de generación.  Para alcanzar este objetivo, trabajamos en proyectos, que abarcan todas las etapas de la producción del papel.”

Por consiguiente, tienen en estudio ya avanzado, 2 tipos de proyectos relevantes:

• por un lado, ampliar el portfolio de productos que ofrezcan soluciones a los plásticos de un único uso y garanticen la eficiencia energética – desde el diseño del producto hasta que llega al usuario final,
• y por otro, incorporar nuevas tecnologías energéticamente más eficientes, que las actuales.

Un ejemplo que requiere inversión en el ámbito de los fondos Next Generation, es en su opinión, la incorporación de tecnologías cada vez más eficientes en los procesos de refinado.

DS Smith Paper

DS Smith (multinacional británica del empaquetado con 300 fábricas en el mundo y 30.000 empleados), ha colocado la producción de envases y embalajes sostenibles en el foco de su estrategia global. Sus envases y productos de embalaje, utilizados en los más variados sectores, desde alimentación hasta la industria de automoción, tienen en el cartón ondulado su principal materia prima. Un producto, que se prevé que crezca a un ritmo del 4% anual entre 2020 y 2026.

Jordi Cazorla, consejero delegado de DS Smith para el sur de Europa, asegura que en 2023 la empresa no fabricará ningún producto de plástico[8].

En su ponencia en Papel BCD, Rubén Hernando director general de DS Smith Papel Europa Sur, ha destacado un proyecto, que se enmarca simultáneamente en los ejes de la descarbonización y de la Economía Circular:

• sustitución del gas natural en las fábricas del grupo, por una mezcla de distintas biomasas, que incluyen también residuos propios.

Las inversiones serán realizadas en poblaciones de menos de 5000 habitantes, en las CC. AA de Aragón y Castilla y León, reforzando el papel fundamental de la industria en el mantenimiento del empleo en los entornos rurales. Además del empleo directo, se generará empleo inducido en áreas como la restauración, hostelería y servicios de mantenimiento.

Fig.3: Ejemplos de innovación en packaging sostenible – DS Smith

Smurfit Kappa

Los 5 pilares de sostenibilidad de Smurfit Kappa, son:

1. Promover la gestión forestal sostenible, a través de la evaluación de la Cadena de Custodia – certificaciones FSC y/o PEFC.
2. Combatir el Cambio Climático, reduciendo su huella de carbono (objetivo cero emisiones netas en 2050), a través de:

• cogeneración (CHP) altamente eficiente;
• reducción del consumo de energía, mediante la investigación y las nuevas tecnologías;
• transición a combustibles con menos emisiones de CO₂, como la biomasa.

3. Mantener un enfoque responsable con respecto al agua – actualmente, más del 90% del agua utilizada en sus operaciones, se devuelve a la naturaleza en buenas condiciones, el resto se evapora o está contenida en los productos.
4. Contribuir a un mundo sin residuos, fomentando el concepto de circularidad:

• Reducir en un 30 %, hasta 2030, la cantidad de residuos enviados a vertederos por tonelada de producto fabricado, en comparación con los niveles de 2013;
• iniciativa Better Planet Packaging, centrada en reducir los residuos provocados por el embalaje y en el diseño e innovación para desarrollar nuevos productos que generen menos residuos, sean reciclables, provengan de fuentes renovables y sean biodegradables.

5. Personas – entablar excelentes relaciones con empleados y clientes, respetando las personas y comunidades donde está presente.

 Rafael Sarrionandia, CEO Kraft Specialities, ha presentado, los proyectos que el grupo va abordar en nuestro país en el marco de la contribución a la recuperación económica.

Según él: “Además de los proyectos para incrementar la eficiencia energética, o incrementar la eficiencia de los procesos productivos, me gustaría de destacar otro aspecto que va en la ADN de Smurfit, que es la innovación”.

En este sentido, ha destacado proyectos, que son verdaderos ejemplos de innovación y sostenibilidad, como:

·         Life Agro Paper – un proyecto enfocado a sustituir el acolchado de polietileno utilizado en la agricultura, por acolchado de papel biodegradable y compostable. Una aplicación práctica llevada a cabo por el grupo AN, en cultivos como el del tomate, ha demostrado que este papel mantiene sus propiedades de resistencia en condiciones de alta humedad y agua, siendo, al mismo tiempo, respetuoso con el medio ambiente.

Fig.4: Agro Paper – Smurfit Kappa

·         BanaBag® – se trata de una solución óptima y sostenible para proteger los racimos en la plantación de bananas y plátanos. Está especialmente diseñado para cumplir con las características requeridas para una excelente protección durante el ciclo completo de crecimiento del fruto. Es totalmente compostable de acuerdo con la norma EN 13432 y puede utilizarse como compost para el suelo. Este producto está siendo aplicado actualmente con éxito en Centro y Sur América.

Fig.5: BanaBag®– Smurfit Kappa

El CEO, ha destacado igualmente en el ámbito de la economía circular, un proyecto para la construcción de una planta de valorización de residuos, en Vizcaya, con la que esperan reducir en 75 mil toneladas el envío de residuos a vertederos.

Otros ejemplos, del portfolio de nuevos productos, disponibles para el mercado y/o diseñados a medida de las necesidades de los clientes:

• ThermoBox – Embalaje de aislamiento térmico: es una alternativa sostenible al embalaje de EPS, fabricado 100% de papel a partir de una combinación de Hexacomb y cartón ondulado.  ThermoBox mantiene frescos los alimentos congelados y refrigerados a lo largo de toda la cadena de suministro. Además, se puede fabricar a medida para adaptarse a cualquier tamaño, sin necesidad de invertir en moldes costosos como ocurre con el EPS. En el transporte, se envía plegado, lo que permite optimizar la logística y el espacio de almacenaje y reducir significativamente los costes. Debido a su exterior de cartón ondulado, este producto es totalmente personalizable y se puede fabricar con distintos acabados para incluir instrucciones de uso, información relacionada con el producto/la sostenibilidad o mensajes de marca. Esto lo convierte también en la solución ideal para el comercio electrónico.

Fig.6 ThermoBox– Smurfit Kappa

• La innovación ha surgido incluso asociada a la pandemia, a través de productos de distanciamiento social – hechos de cartón (separadores, mamparas, biombos u otros elementos), que pueden ser utilizados, sustituidos y reciclados de forma rápida y sencilla, sabiéndose además que el Covid-19 tiene una vida más corta en cartón que en otros materiales como el acero y el plástico.

Fig. 7 Productos de Distanciamiento Social– Smurfit Kappa

–          Amplia gama de bandejas y cajas de montaje manual especialmente diseñadas para frutas y verduras. Las bandejas de montaje manual son ideales en aquellos lugares en los que no se dispone de máquinas, como en el caso del embalaje en el campo.

–          TopClip – Cubierta de cartón para latas es una alternativa sostenible al film retráctil que se utiliza normalmente para agrupar varias latas.

Fig. 8 TopClip – Smurfit Kappa

Los proyectos integrados en Papel BCD, que “reclaman” un PERTE para la cadena de valor del papel, tienen un doble propósito:

• alcanzar el desarrollo industrial sostenible, basado en la eficiencia energética materiales renovables, innovación, descarbonización y economía circular;
• Contribuir a la vertebración de la España rural.

Citando a Rafael Sarrionandia – “Ahora solo queda esperar que el gobierno haga suyas nuestras ideas y proyectos, que apoye el sector y que nos ayude a llevarlas a cabo. Creo que entre todos podremos reactivar la economía de este País y hacer un mundo mejor y más sostenible”.

[1] Elaborado por CEPREDE

[2]  Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón.

[3] Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica, incluidos en el Real Decreto-Ley de medidas urgentes para la modernización de la Administración pública y para la ejecución del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, herramienta de la gestión de los fondos europeos atribuidos a España.

[4] Incluso, en localidades de menos de 5.000 habitantes.

[5] El término bioeconomía, plantea el desarrollo económico como una extensión de la evolución biológica, mientras la Economía Circular, tiene como objetivo la producción de bienes y servicios al tiempo que reduce el consumo, materia sobrante, agua y fuentes de energía, basándose en el principio de “cerrar el ciclo de vida” de cualquier producto. Bioeconomía circular es, por tanto, la integración de la bioeconomía y la economía circular, donde la sostenibilidad en el uso de los recursos es la clave.

[6] Materia prima para la industria textil, obtenida a partir de procesos de transformación de la fibra de celulosa.

[7] Biomasa forestal y proveniente de subproductos agrícolas.

[8] https://elpais.com/economia/2021-01-16/ds-smith-se-libera-del-plastico-en-los-envases.html